De esta manera, se prohíbe el riego de jardines, parques o zonas verdes, ya sean públicos o privados, así como de huertos; el riego de campos de golf que no utilicen agua reutilizada, y se prohíbe el baldeo de calles, aceras o fachadas, públicas o privadas, y demás usos urbanos.
Además, se prohíbe el llenado o rellenado de piscinas, el lavado de coches, salvo en establecimientos autorizados que cuenten con sistemas de reciclado y recirculación del agua.
El bando de Alcaldía contempla la prohibición de fuentes y lagos ornamentales, lúdicos o deportivos, públicos o privados, salvo que tengan también sus sistemas de recirculación, como la prohibición de duchas y surtidores públicos.
El agua de las duchas de las playas ya se restringió en verano. Álex Zea
Otras medidas El edil de Medio Ambiente, Juan Olea, ha recordado que el consistorio ha puesto en marcha medidas contra la sequía como un proyecto para el uso de agua regenerada con un contrato ya en marcha y un ahorro en los últimos dos meses próximo al 10%. «Por desgracia, al no seguir llegando las precipitaciones nos obligan a dar más pasos siguiendo las indicaciones de Acosol», ha dicho.
El consistorio benalmadense ya puso en marcha medidas como suprimir el agua de las fuentes y las duchas de las playas desde el 15 de octubre, la reducción de un camión de baldeo en el servicio de Limpieza, la reducción del 20% en el riego de zonas verdes y ajardinadas y el estudio para modificar rotondas y medianas para contribuir a no usar agua para riego.