Agentes de la Policía Nacional han detenido en Fuengirola en los últimos días a cuatro mujeres y dos hombres por su presunta implicación en la comisión de varios delitos contra el patrimonio y todos con un denominador común, ya que las víctimas eran personas mayores.
Entre los modus operandi detectados figuran desde los tradicionales carteristas, pasando por sustracciones de dinero y/o tarjetas en las proximidades de bancos, hasta los ‘tironeros’ de cadenas y joyas –estos son los que más alarma generan por el empleo de la violencia–.
Los arrestos son fruto de tres operaciones distintas enmarcadas en un mismo plan en prevención de estos ilícitos penales y en coordinación con la delegación de Participación Ciudadana de la Comisaría de Fuengirola para la atención de colectivos en situación de vulnerabilidad, dentro del denominado Plan Mayor Seguridad, ha indicado la Policía Nacional en un comunicado.
En cuestión de unas semanas, agentes adscritos al Grupo de Delincuencia Urbana de la Comisaría de Fuengirola habían aunado varias denuncias por distintos delitos contra el patrimonio que afectaban especialmente a personas de edad avanzada. Así, se estableció un plan específico para prevenir nuevos hechos delictivos entre colectivos vulnerables e investigar los ya perpetrados.
En el transcurso de las indagaciones, se detuvieron a tres mujeres, las cuales vigilaban los cajeros de entidades bancarias y captaban a sus objetivos entre los mayores allí presentes. Las sospechosas ofrecían ayuda a las víctimas, observando cómo estas tecleaban la clave PIN del medio de pago utilizado.
A continuación y ya fuera de la entidad bancaria, las seguían y les sustraían el dinero retirado de la sucursal bancaria y/o la tarjeta de crédito, realizando extracciones de importantes cantidades de dinero, antes incluso de que los perjudicados se percataran de la sustracción.
En otra de las operaciones, dos varones fueron detenidos, incluido un menor, por presuntamente asaltar a personas vulnerables. Los investigados vigilaban los comercios del centro de la localidad y seleccionaban a las víctimas que portaban alhajas a la vista. Tras seguirlas, les propinaban un fuerte tirón de las cadenas y/o joyas. Algunos de los denunciantes presentaban lesiones.
Por último, en otra de las investigaciones, se detuvo a una mujer que se movía por la estación de autobuses de Fuengirola y a la que se atribuye la sustracción de una cartera que portaba una mujer octogenaria en el interior de su mochila.
Los detenidos, que eran reincidentes, según los investigadores, ya han sido puestos a disposición judicial. En todos los casos, se ha coordinado la actuación policial con el responsable de Participación Ciudadana de la Comisaría de Fuengirola para su inclusión en el marco del Plan Mayor Seguridad y la atención a colectivos vulnerables.
