Me temo que los accidentes trágicos no se podrán prevenir simplemente mediante pruebas obligatorias a los conductores mayores de 80 años (un juez escocés pide pruebas obligatorias para los conductores mayores de 80 años después de un accidente mortal, 22 de octubre). También requerirá un procedimiento mucho más exhaustivo por parte de la Agencia de Licencias de Conductores y Vehículos (DVLA) al evaluar los informes de diagnóstico de demencia de un conductor. Una amiga mía sufrió un accidente menor tras su diagnóstico de demencia y su familia, con razón, le quitó las llaves del coche. También informaron el diagnóstico de demencia a la DVLA, asumiendo que, como resultado, le quitarían la licencia.
La DVLA tardó meses en realizar una supuesta valoración, que consistió en solicitar la historia clínica al hospital donde había sido atendida un año antes, cuando su estado era muy temprano y aún era capaz de conducir con seguridad.
¿El resultado final? En lo que respecta a la DVLA, puede conservar su licencia. Afortunadamente, su familia le ha ocultado la información, ya que no es seguro conducir y sería un peligro para ella y los demás si se le permitiera hacerlo. El sistema simplemente no es adecuado para su propósito y las consecuencias son profundamente preocupantes.
Nombre y dirección proporcionados
En España, al igual que en el Reino Unido, el permiso de conducción de un coche estándar debe renovarse cada 10 años. Sin embargo, a partir de los 65 años, se exige la renovación del permiso español cada cinco años. El proceso de renovación implica un examen médico en un centro de evaluación autorizado, pruebas de aptitud física y mental, incluidas pruebas de visión y audición. El coste de la renovación de la licencia oscila entre 20 y 50 euros, según el centro de pruebas, y la tasa gubernamental obligatoria es de unos 25 euros. No existe un límite de edad máxima para conducir siempre que se cumplan estos criterios.
Si el Reino Unido implementara un proceso similar, no sólo habría menos conductores peligrosos en nuestras carreteras, sino que los problemas médicos se detectarían antes que en la actualidad y también podrían abordarse antes.
Tengo casi 82 años y estoy a punto de renovar mi licencia. Estaría feliz de someterme y pagar pruebas similares para tener la tranquilidad que me brindaría a mí y a mi familia, sin mencionar a todos los demás en mi vecindad.
Gamble Fendley
Nuevo Malden, Londres