‘La hora del lobo’ es la segunda entrega de la trilogía ‘noir’ que el escritor barcelonés Toni Hill estrenó en 2023 con ‘El último verdugo’. Aquella primera transcurría en Barcelona y el colofón también lo hará, revela. «Pero las segundas entregas de las trilogías parece que quedan en tierra de nadie y quise darle un distintivo: que fuera ‘la novela de los Pirineos’», añade quien la ambientó en los pequeños pueblos del valle de Boí, en la comarca catalana del Pallars Sobirà. Y los Pirineos, con sus pequeños pueblos rodeados de naturaleza y de inviernos fríos, donde todos se conocen, con una atmósfera más que particular, entre opresiva e idílica, han sido y siguen siendo escenario perfecto para la novela negra.
Tanto, que ya se les puede reconocer con una etiqueta propia dentro del rural ‘noir’, ese subgénero de la novela negra ambientado en lugares que son las antípodas de las zonas urbanas. Desde los Pirineos atlánticos, en la zona del País Vasco y Navarra, hasta los catalanes, pasando por la montaña aragonesa y por el lado francés de la cordillera, se puede mapear una ruta vacacional siguiendo las huellas de los ‘Pirineo noir’ más recientes y de algunos de los históricos más sonados, entre estos últimos, cómo no, la serie con la que Dolores Redondo descubrió a los lectores los mitos y las luces y sombras del valle navarro del Baztán, iniciada con ‘El guardián invisible’, o el ‘true crime’ ‘Tor’, del popular superventas Carles Porta, que acaba de volver a la montaña del Pirineo de Lleida en ‘Tor. El fuego que no se apaga’ para actualizar las pistas sobre el oscuro caso real.
Bajo estas líneas una decena de propuestas y el mapa más negro del Pirineo:
Dolores Redondo (Destino / Columna)
A la espera de saber si en su nueva novela, anunciada para este octubre, pero de la que aún no se ha desvelado nada, la autora donostiarra volverá al valle navarro del Baztán, que ha convertido en escenario de negro bañado mitos vasconavarros como el Basajaun o las ‘belagiles’, ahí está la trilogía superventas que inició con ‘El guardián invisible’, protagonizada por la policía Amaia Salazar y a la que sumó la precuela ‘La cara norte del corazón’.
Toni Hill (Grijalbo)
En esta segunda entrega de su trilogía del Verdugo, el autor catalán abandona momentáneamente Barcelona para enviar a la criminóloga Lena Mayoral al Pirineo, a los pueblos del valle de Boí, buscando a un adolescente desaparecido siete años atrás la noche que estrangularon a su madre. Mientras, una trama con la traición como protagonista volverá a dar un papel estelar al Verdugo.
Carles Porta (Reservoir Books / La Campana)
Hay que remontarse tres décadas atrás, a ‘Tor’, para ir al origen del éxito del hoy superventas y mediático periodista Carles Porta, el rey del ‘true crime’ (ya sea en libros, pódcast, radio o televisión). Este Sant Jordi daba nuevas pistas sobre aquella su primigenia investigación del legendario y oscuro caso real ocurrido en este minúsculo pueblo del Pallars Sobirà, en el Pirineo catalán, con ‘13 casas y 3 muertos’, como rezaba el título original del libro en catalán.
Bernard Minier (Salamandra Black)
El autor francés ha trasladado a los escenarios del norte de los Pirineos en los que pasó su infancia, la reciente sexta entrega de la serie del comandante de la policía de Toulouse, Martin Servaz. Este se desplazará al valle cercano a la abadía cisterciense de Aigues-vives tras la misteriosa llamada de la madre de su hijo adoptivo. Un derrumbe que corta la carretera le confinará en una claustrofóbica atmósfera en los Pirineos franceses.
Laia Vilaseca (Suma / Rosa dels Vents)
La autora catalana se inspiró en un pueblo pirenaico del Berguedà que conoce bien para su última novela, que transcurre en la ficticia población de Sant Jordà, del mismo modo que ambientaba su primer éxito, ‘La chica del vestido azul’, en el inventado Treviu, en la misma zona. En ‘La isla del silencio’, el hijo del policía que investigó un triple y macabro asesinato desaparece cuando se disponía a rodar un documental sobre el caso.
María Pérez Heredia (Roja&Negra)
El Pirineo aragonés, focalizado en el ficticio y turístico pueblo de As Boiras, en el Alto Aragón, es el lugar donde aparece el cadáver de la hija de un influyente senador francés. Su ‘modus operandi’ recuerda al del ‘Carnicero del valle’, un psicópata que actuó 30 años antes. Mientras el comisario de la policía francesa Kevin Girard investiga el asesinato, su esposa tendrá mucho que decir del caso original, que vivió de cerca.
Jordi Llobregat (Destino)
El escritor y director de València Negra se mantiene fiel a los escenarios pirenaicos que ya transitó en ‘No hay luz bajo la nieve’ con la subinspectora Álex Serra. Aquí, de nuevo en un clima frío, amenazante y fantástico, entre mitos y leyendas de La Vall Fosca, en el Pallars Jussà, varias niñas aparecen asesinadas y la ya exagente ve paralelismos con la desaparición de su hermana 20 años atrás.
Txemi Parra (Harper Collins)
El actor y guionista de series como ‘Aida’, ‘El Internado’ o ‘Águila Roja’ urdió este ‘thriller’ de sombras oníricas y secretos olvidados en el Pirineo aragonés. Personajes solitarios que transitan del centro histórico de Jaca a los glaciares y las estaciones de esquí, donde durante una tormenta desaparece una madre soltera en un telesilla. El cabo Simón Ventura, con su perra Avellana, investigará el caso.
Sebastià Bennasar (Alrevés / Clandestina)
El periodista mallorquín y director del festival Tiana Negra buscó en 2016 el frío y las primeras nieves del valle de Boí para llevar hasta allí a un asesino que deja los cuerpos torturados y martirizados de sus víctimas en las iglesias de estos parajes, Patrimonio de la Humanidad. Será el comisario Fuster quien se enfrentará al mal pero también a las antiguas supersticiones medievales.
Pep Coll (Proa)
Siendo niño, Pep Coll descubrió en boca de sus mayores la historia de un crimen real de 1943 que quedó impune, ocurrido en el pueblo de Carreu, en un rincón de su Pallars Jussà natal. Un caso de rencillas y odios ancestrales, con muchos paralelismos con ‘A sangre fría’, de Capote, que el propio escritor investigó y desarrolló en esta novela, ganadora del Premi Crexells y del Premio de la Crítica.
Jerónimo Tristante (Algaida)
El autor murciano, creador del policía Víctor Ros y enamorado del Pirineo aragonés, situó en él un pueblo ficticio, El Valle, donde desarrollar la trama negra que le valió el Premio Ateneo de Sevilla 2017. Allí desaparece una niña el día de Halloween. No será la única e Isabel Amat, una mujer engañada por su marido, descubrirá paralelismos con unos crímenes de 1973.