En esta imagen aérea, se ven daños en una fábrica farmacéutica de Pfizer después de que un tornado azotara las instalaciones dos días antes, en Rocky Mount, Carolina del Norte, el 21 de julio de 2023.
Sean Rayford | imágenes falsas
Pfizer El lunes dijo que había reiniciado la mayoría de las líneas de producción en una planta de fabricación de medicamentos que resultó gravemente dañada por un tornado hace dos meses, pero agregó que algunos medicamentos de la instalación podrían escasear hasta al menos mediados de 2024.
En un comunicado, Pfizer destacó que sólo ha dado el «primer paso hacia la recuperación total» de su planta de Rocky Mount, Carolina del Norte. La compañía espera que las operaciones de la instalación se reanuden por completo a finales de año.
La planta de Rocky Mount suministra casi el 8% de todos los medicamentos inyectables estériles utilizados en los hospitales de EE. UU., incluidos anestesia, analgesia, productos terapéuticos, antiinfecciosos y bloqueadores neuromusculares. La instalación también fabrica alrededor del 25% de los medicamentos de la empresa en esa categoría.
En agosto, Pfizer advirtió a los hospitales que algunos medicamentos podrían sufrir interrupciones en el suministro.
Una inyección de la planta escaseaba a finales del mes pasado, según una base de datos de la Sociedad Estadounidense de Farmacéuticos del Sistema de Salud. Era un tipo de inyección de cloruro de sodio, que se utiliza para reponer el agua y la sal perdida como resultado de ciertas condiciones.
Pfizer dijo el lunes que había reiniciado la producción de unos 13 medicamentos, que fueron priorizados en función de «las necesidades de los pacientes y los niveles de inventario». La compañía no especificó qué medicamentos son.
Pfizer dijo que también continúa monitoreando las solicitudes de emergencia para ciertos medicamentos fabricados en la planta de Rocky Mount. La compañía implementó el proceso de pedido de emergencia en agosto para gestionar la distribución de 12 medicamentos «de gran necesidad médica».
El anuncio de Pfizer se produce cuando Estados Unidos ya enfrenta una escasez sin precedentes de medicamentos, que van desde píldoras para el TDAH hasta analgésicos y terapias inyectables contra el cáncer. Esa escasez se debe a problemas de control de calidad de fabricación y aumentos repentinos de la demanda, entre otros factores.