En septiembre de 2021, Sierra Bermeja fue arrasada por el primer incendio de sexta generación declarado en España. Las virulentas y peligrosas llamas calcinaron 10.000 hectáreas de terreno, dejando una cicatriz que aún sobrecoge cuando se visita el Valle del Genal.
Un mes después el Plan Infoca dio por extinguido el incendio forestal y en noviembre de ese año se declaró la Emergencia de los trabajos de mitigación del riesgo hidrológico forestal en los terrenos públicos afectados -el 78% del suelo quemado es de titularidad pública, solo 2.000 hectáreas eran propiedad de privados- por el fuego.
Esa actuación urgente incluía obras de corrección hidrológica para evitar la erosión del suelo, entonces desprotegido por los estragos del fuego, por ejemplo, por un episodio de fuertes lluvias que provocase escorrentías y torrentes de agua montaña abajo.
Para ello se emplearon los troncos quemados así como toda la vegetación calcinada que se recuperó tras la extinción del incendio para construir diques y escalones naturales en las laderas empinadas, pensadas para frenar la velocidad del agua que podría tener un efecto de «lavado» del suelo, al producirse el arrastre de semillas y otros elementos necesarios para la regeneración natural del suelo.
Uso de los troncos quemados en el incendio de Sierra Bermeja para crear diques naturales. L.O.
Más de un año después, la Junta de Andalucía ha sacado a subasta los ejemplares de pino pinaster calcinados en el incendio que no se pudieron emplear en la construcción de esas obras de emergencia y que se han apilado y conservado para su aprovechamiento.
«Las leña, biomasa y madera objeto de este expediente constituye un recurso forestal susceptible de aprovechamiento por tener valor comercial», se recoge en el contrato, en el que se especifica que los adjudicatarios tendrán seis meses para retirar la madera acopiada de los cargaderos ubicados en determinados caminos y cortafuegos de Sierra Bermeja.
«La retirada de la madera acopiadas en los cargaderos constituyen una necesidad para la gestión forestal sostenible del monte público», indica el contrato.
La madera que se subasta se divide en dos lotes, el primero, de 4.865,8 estéreos -unidad para medir el volumen de una pila de troncos- en el término municipal de Estepona y Jubrique, con un valor de 9.731,6 euros y uno de 7.011,7 estéreos, por 14.023,4 euros, en el término municipal de Estepona.
La delegación de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul de Málaga ha adjudicado el contrato del primer lote a la empresa cordobesa Biomasa de la Subbética S.L. por 18.733,33 euros (IVA excluido). El segundo lote se ha adjudicado a Dunas 2000 S.L., de Huelva, por 39.349,2 euros (IVA excluido).
-Aspecto que presenta la zona de Sierra Bermeja en Estepona. Alex Zea
Una sierra, dos incendios En junio del año pasado, Sierra Bermeja volvió a sufrir un segundo incendio que calcinó cerca de 5.000 hectáreas de terreno quemado.
En este caso, el fuego se originó en la finca privada de La Resinera -que perteneció a Gadafi-, por lo que se ha detenido a cuatro personas por imprudencia grave, una causa que investiga el Juzgado de Ronda.
La principal hipótesis que se maneja es que el fuego se inició durante unos trabajos con maquinaria pesada en la finca «en circunstancias inapropiadas para las condiciones existentes».
Los implicados son el gestor de la finca en la que se originó el incendio, un ingeniero de montes, un guarda rural y el conductor de la excavadora.