Pedro Sánchez ha anunciado este martes la aprobación de un plan para elevar el gasto en defensa hasta el 2% del PIB en 2025, lo que ha generado el enfado de los socios de izquierda: ERC, EH Bildu y Podemos. El portavoz de los republicanos en el Congreso, Gabriel Rufián, ha llegado a ironizar con la hipocresía del Gobierno al reivindicar la figura del papa Francisco y su labor «pacificadora» a la vez que aprueban el aumento del gasto militar en 10.471 millones de euros. «Sánchez en estado puro», ha apuntado el dirigente de ERC en redes sociales.
Con el objetivo de cumplir sus compromisos con la OTAN y la Unión Europea, el Ejecutivo ha pisado el acelerador y ha dado el visto bueno al ‘Plan Nacional para el Desarrollo e Impulso de la Tecnología y la Industria de la Seguridad y Defensa’. Sin embargo, la mayoría de sus aliados parlamentarios se han mostrado críticos con el anuncio. Fuentes de ERC lamentan que el aumento del gasto no se haga de manera coordinada con el resto de la UE, que no vaya a pasar por el Congreso y se muestran preocupadas por el «impacto social» que tendrá.
«Sánchez es capaz de instaurar 3 días de luto en un Estado aconfesional por la muerte de un Papa pacifista y durante esos 3 días anunciar 10.000 millones de euros más en armas. Sánchez en estado puro», ha señalado su portavoz en la red social X, antes Twitter, criticando este paso del Ejecutivo de coalición que tiene detractores en el propio seno del Consejo de Ministros. Además, el portavoz republicano ha afirmado que esta decisión del Ejecutivo es un «buen homenaje al primer aniversario de sus 5 días de ‘reflexión'» que se tomó Sánchez hace un año.
No son las únicas críticas que ha recibido el plan del Gobierno. Fuentes de EH Bildu aseguran que no van a apoyar «la aceleración del gasto militar». «En absoluto. Si alguien cree que el futuro pasa por reducir gasto social y fabricar armas, esa no es la Europa por la que apuesta EH Bildu», sostienen. Con mucha más contundencia se ha expresado la portavoz de Podemos, Ione Belarra, que ha tildado al Ejecutivo de «Gobierno de la guerra».
En las próximas semanas, cuando Sánchez comparezca en el Congreso para dar cuenta de este plan, los socios podrán mostrar su rechazo al presidente del Gobierno. Sin embargo, el jefe del Ejecutivo ha dejado claro que el incremento del gasto ya ha sido aprobado por el Consejo de Ministros y no necesita el visto bueno de la Cámara Baja.