El Frente Polisario aprobó este jueves en su Congreso trienal intensificar la lucha armada contra Marruecos en el Sáhara Occidental, como parte de la nueva estrategia del movimiento independentista saharaui.
«La aprobación del plan de acción nacional, con la lucha armada como eje principal, confirma la apuesta del pueblo saharaui, y de su representante legítimo el Frente Polisario, por la lucha armada como instrumento para defender sus derechos y recuperar la soberanía sobre su tierra», declaró a EFE el portavoz del congreso Mohamed Sidati.
El Polisario celebra estos días el primer Congreso desde la ruptura en 2020 del alto el fuego con Marruecos, que se prorrogará hasta el próximo sábado con la elección de un nuevo liderazgo.
“Este congreso debe constituir la ruptura con el pasado, todos nuestros esfuerzos deben centrarse en la lucha armada», declaró a Efe la joven congresista saharaui Dahba Mohamed, que considera esta línea «la única vía que puede garantizar objetivos para la independencia».
El plan de acción también recoge «fortalecer» la vía diplomática y la situación en los «territorios ocupados» -el 80% del Sáhara Occidental controlado por Marruecos- además de la comunicación y la gestión de los campamentos en territorio argelino donde residen más de 170.000 refugiados saharauis, según ACNUR.
El Congreso, máxima autoridad del Polisario, sacó también adelante por mayoría el documento de la “ley fundamental”, reglamento interno de la organización, que ahora establece como requisito obligatorio la «experiencia en combate» de los candidatos a secretario general.
Renovación del liderazgo Mañana viernes está previsto que comience la votación para renovar el liderazgo, que disputarán el dirigente Bachir Mustafa y el actual secretario general, Brahim Gali, en un inédito congreso que comenzó sin consensuar un único candidato.
La votación se prolongará hasta el sábado aunque no se esperan resultados hasta el final de la jornada o el día siguiente.
El giro del Gobierno español sobre el Sáhara Occidental, que mostró el pasado año su apoyo a la propuesta marroquí de autonomía sobre la excolonia, ha ocupado también gran parte de los debates de los congresistas durante esta semana.
Más de 370 invitados internacionales -entre ellos representantes de Unidas Podemos, que forma parte del Gobierno español- y 2.200 congresistas saharauis han participado en el encuentro que se celebra desde el pasado viernes en el campamento de refugiados de Dajla.