El Ayuntamiento de Benalmádena ha abierto una investigación para esclarecer un presunto caso de maltrato animal en dos zonas rurales del municipio, tras la denuncia presentada por el Grupo Animalista de Benalmádena (GAB) y el Partido Animalista (Pacma) sobre un supuesto criadero ilegal de gatos egipcios y la existencia de otros animales en estado de abandono en unas instalaciones en condiciones deficientes.
El alcalde de Benalmádena, Juan Antonio Lara, ha ordenado a la Policía Local y técnicos municipales que inspeccionen la zona para verificar la existencia de maltrato animal y coordinar las medidas necesarias para trasladar a los animales afectados a centros de protección animal con los que el ayuntamiento mantiene contratos o convenios de colaboración.
El regidor ha puesto los hechos en conocimiento de la Oficina Comarcal Agrícola de la Junta de Andalucía al encontrarse en una zona registrada como «núcleo zoológico».
La denuncia se ha hecho viral en las redes sociales, donde decenas de personas claman para que se cumpla la Ley de Bienestar Animal y se proteja a los ejemplares afectados.
PACMA
Denuncia El Partido Animalista y el Grupo Animalista de Benalmádena denuncian que además de los gatos egipcios hay otros animales, como perros, terneros, gallinas, palomas, cerdos e incluso caballos, en pésimas condiciones en jaulas oxidadas, sin agua y sin apenas movilidad en las zonas popularmente conocidas como Villa Moscas y Villa Nicho.
El pasado mes de julio, voluntarios de estas entidades realizaron una visita a la zona ganadera de Benalmádena, fundada en 1999 por el consistorio y conocida como Villa Moscas, y durante la inspección, en la que también participaron dos policías municipales y la técnica veterinaria municipal, «se observaron condiciones alarmantes de insalubridad y la presencia de un grupo de gatos egipcios en lo que aparentaba ser un criadero presuntamente ilegal con jaulas amontonadas y oxidadas». Durante la visita, explican ambas entidades, se constató que estos animales «estaban en condiciones de presunto maltrato: sucios, con falta de alimentación, agua estancada y escasa movilidad».
Imagen de las instalaciones denunciadas. PACMA
El Pacma y el GAB añaden que un mes después se realizaron otras dos visitas, la primera a la zona trasera del almacén municipal número 2 y otra a la misma zona ganadera inspeccionada en julio. Detrás del almacén municipal aseguran que había animales encerrados, con heridas visibles e instalaciones sin luz natural ni ventilación; y en el recinto visitado en julio, las circunstancias eran similares, a excepción de una «relativa puesta a punto» del área de los gatos egipcios.
Ambas instalaciones, ubicadas en suelo municipal, se describen como «potenciales focos de infección y presuntas localizaciones de maltrato animal». Por ello, piden al Ayuntamiento de Benalmádena que clausure las instalaciones, suspenda las licencias de tenencia de animales, y que los retire y los envíe a un centro de protección animal. Además, solicitan la documentación relacionada con denuncias previas y el seguimiento veterinario que se haya podido realizar.