Amigos y compañeros de la artista María Jiménez, fallecida esta madrugada a los 73 años en Sevilla, han destacado este jueves en su capilla ardiente el carácter «disfrutón» y «sin filtros» de la cantante.
Jorge Cadaval, miembro del dúo Los Morancos, ha asegurado haber pasado «unos momentos maravillosos en la vida con ella», por lo que la recuerda «con mucho cariño» y «con la mirada muy limpia, como la tiene la gente que te quiere».
5 La capilla ardiente de María Jiménez en el Ayuntamiento de Sevilla, en imágenes
«Era una disfrutona de todo y nos ha hecho disfrutar», ha dicho a los periodistas en el Ayuntamiento sevillano, donde está instalada la capilla ardiente de la artista, que ha recibido a miles de personas desde que abrió a la una de la tarde.
Cadaval ha añadido que María Jiménez «no tenia filtro en nada y fueras quien fueras te miraba igual», además de destacar su sentido del humor. «Nunca se enfadaba, solo por las injusticias», ha resaltado, para añadir que la cantante «luchaba por muchísimas cosas cuando era difícil luchar».
También los diseñadores Victorio y Lucchino han acudido a la capilla ardiente, donde han calificado a María Jiménez como «una mujer adelantada a su tiempo, especial y maravillosa, con un corazón muy grande».
«Su vida ha sido muy dolorosa y muy alegre a la vez», han dicho de la cantante, de la que subrayan también «su imagen sexy, adelantada a su época». «No tenía filtro, se levantaba el traje y enseñaba su ropa interior, era divina».
Por el Salón Apeadero del Ayuntamiento han pasado, junto a miles de admiradores, otros artistas como la cantante India Martínez, que la ha calificado como «única, desgarradora y artista de los pies a la cabeza».
«Se nos ha ido una reina», ha sentenciado Martínez, para quien posiblemente María Jiménez haya sido «la última gran diva».
Durante la tarde han acudido también a reconfortar a la familia otros artistas como María del Monte, acompañada de su esposa, Inmaculada Casal, y Antonio Romero y Rafael Ruiz, miembros del dúo musical Los del Río.
El cantante y hostelero Jaime Alpresa ha versionado «Nos sobran los motivos», de Joaquín Sabina, para despedirse de su amiga, a la que define como «grandiosa como artista y persona». Ha explicado que ella les pidió que se lo cantaran ante su féretro: «Qué mejor que esta canción para seguir estando con ella», ha sentenciado.
Junto a sus hermanos Juan y José María, el grupo sevillano ha cogido la guitarra para hacer lo que hacían con María. «Ella no dudaba en salir a cantar y bailar en cualquier sitio», ha relatado al terminar, recordando que «su casa de Chiclana era su paraíso y allí hemos disfrutado mucho con ella».
A los acordes de «Nos sobran los motivos» se ha levantado de su silla Sergio González, bailaor y amigo íntimo de María Jiménez, que le ha dedicado un último «zapateao» después de trabajar juntos «durante muchísimo tiempo», ha explicado a EFE, a la vez que ha señalado que «ha sido algo improvisado».
