Desde que saliera a la luz en su momento que Íñigo Onieva fue infiel a Tamara Falcó besándose con otra mujer poco antes de su boda la relación de la pareja ha estado fuertemente sometida al escrutinio de la lupa de los medios y el público.
A partir de entonces, la desconfianza en torno a la solidez de su matrimonio comenzó un ascenso meteórico hasta el punto en que ya no queda prácticamente nadie que crea que entre ambos hay un amor puro y verdadero al tiempo que la pareja ha sido objeto de constantes rumores sobre crisis y conflictos relacionados en especia con sus planes a futuro para formar una familia.
En este marco la aparición reciente de Íñigo Onieva en el evento de Mujer Hoy, donde Isabel Preysler fue premiada ha confirmado la crisis entre él y la familia de su mujer.
Mientras que su cuñado, Fernando Verdasco, posó al lado de Preysler y su esposa Ana Boyer Onieva prefirió escabuirse al margen del posado familiar en el photocall de forma que no fue fotografiado junto a su suegra en una ocasión tan señalada.
Con este gesto de la foto se han disparado las interpretaciones por parte de los expertos en la prensa rosa que han especulado sobre cómo la ausencia en la foto podría tener un evidente siginificado de la situación en la que se encuentra su matrimonio Según el periodista Saúl Ortiz, Íñigo ha manifestado su agotamiento ante la y podría ser una señal de tensiones no resueltas en la pareja,
