El primer largometraje de la cineasta molinense Eva Libertad, Sorda, fue distinguido este sábado con el premio de la Confederación Internacional de Cines de Arte y Ensayo (CICAE), uno de los jurados independientes de la Berlinale, además de hacerse con el premio del público de la sección Panorama.
«Esta película se ha hecho por amor, en muchos sentidos», en primer lugar, «mi amor por mi hermana Miriam Garlo, que interpreta el personaje principal de la película», dijo Libertad al recoger el premio CICAE.
«Esta película está inspirada en nuestro vínculo. Es por eso que siempre decimos que llevamos toda la vida preparándonos para hacer esta película sin saberlo», añadió.
Este filme se hizo también con «mi amor por la sordera, del que he aprendido tanto a través de mi hermana, y con el amor de un equipo que se implicó profundamente y trabajó tan duro, mis productores, el equipo, el reparto, para hacer realidad esta película», agregó.
«Ahora, este premio hará que todo este amor crezca y llegue a más gente», afirmó.
Destacó que «las salas de cine son lugares de encuentro entre diferentes personas».
«Nuestro sueño al hacer Sorda era que este encuentro de personas fuera también un lugar de encuentro entre el público oyente y el público sordo. Este premio ayudará a hacer realidad ese sueño», dijo.
Afirmó sentirse honrada con recibir este premio y muy contenta de estar en la Berlinale, un «gran festival» con películas siempre «tan inspiradoras».
El filme cuenta la historia de Ángela (Miriam Garlo), una mujer sorda, que va a tener un bebé con Héctor (Álvaro Cervantes), su pareja oyente. El embarazo hace aflorar sus miedos frente la maternidad y sobre cómo podrá comunicarse con su hija. La llegada de la niña genera una crisis en la pareja y lleva a Ángela a afrontar la crianza de su hija en un mundo que no está hecho para ella.
