‘Babylon Show’ ya es historia en Telecinco. La gran apuesta de Mediaset para la nueva temporada no ha conseguido convencer a la audiencia tras 13 emisiones en el access prime time de la cadena. Carlos Latre, que pretendía reflotar intentando reflotar una de las franjas más difíciles de la televisión, no ha podido hacer frente a David Broncano y a Pablo Motos.
El formato se estrenaba con un dato esperanzador alcanzando el doble dígito. Sin embargo, todo fue a peor conforme pasaban los días llegando a ser superado por las apuestas de las cinco principales cadenas de la competencia. ‘Babylon Show’ llegó a anotar un triste 3,1% de cuota de pantalla en el ‘prime time’ de Telecinco.
En este sentido, Mario Revuelta, director de casting del ‘talk show’ conducido por Carlos Latre, ha compartido una pequeña reflexión sobre la cancelación de ‘Babylon Show’: «El programa ha echado el telón. 13 días nos han dado para competir contra la inercia y maquinaria de 2 claros competidores, que llevan emitiéndose 19 y 6 años, respectivamente», comienza recordando.
«¿Qué se han hecho cosas mal? Seguro, pero programas tan grandes tardan en engrasarse», continúa exponiendo. «Es preocupante, y ciertamente indignante, que las cadenas negocien tan a la baja los presupuestos para dar luz verde a un programa tan enorme y sorprende la poca paciencia que tienen al medir sus resultados», denuncia en su cuenta de Linkedin.
De esta manera, Mario Revuelta hace ver el poco cuidado que se ha tenido con ‘Babylon Show’: «No se pueden pedir estrellas de renombre, decorados espectaculares, llenar el plató de cosas, humor original y mordaz, ser originales sin perder la esencia, meter 1.000 elementos y colaboradores si no pagas por ello», opina sobre cómo ha sido el trato del programa.
«Los directivos de TV piden oro desde el minuto uno, pero no dan herramientas para conseguirlo, porque los presupuestos, recursos y equipo se cierran a mínimos. Así no se puede», lamenta el director de casting tras tres semanas de constantes cambios.
Pese a todo, Mario Revuelta no solo echa la culpa a Mediaset. El directivo también pone el foco en aquellas personas que han criticado severamente el programa: «Me asombra la maldad, el escarnio y el deseo de fracaso que nos ha transmitido gente anónima desde el minuto uno, incluso antes del estreno».
Por último, el encargado de casting de ‘Babylon Show’ lanza una dura advertencia: «Trabajar en televisión se está convirtiendo en una trampa, una amenaza a la salud mental situada entre el disparate, la locura, la vanidad descontrolada y cierta esclavitud. Seguro que quedan algunos reductos donde se puede trabajar en televisión con creatividad y respeto, y hasta disfrute, pero no sé dónde están. No todo vale», concluye.