El Ministerio de Trabajo ha acusado a la patronal CEOE de «burlarse» del «diálogo social» y de la «democracia» tras negarse a pactar una ley para la reducción de jornada a las 37,5 horas semanales. Los empresarios, tal como avanzó El Periódico, del mismo grupo editorial que este diario, ha desoído el ultimatum lanzado por Yolanda Díaz y se ha personado en la mesa de diálogo social este lunes sin una propuesta escrita para disminuir el tiempo de trabajo. Y desde Trabajo han elevado el tono contra los de Antonio Garamendi, resignados a sacar adelante la norma únicamente con el apoyo de los sindicatos.
«Me temo que hay demasiados lastres políticos de la patronal», les ha acusado el secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey, en rueda de prensa tras el encuentro con los agentes sociales. Salvo cambio de guion inesperado, las negociaciones en el seno del diálogo social para la ley de reducción de jornada ha saltado por los aires este lunes.
Trabajo da por seguro el acuerdo con los sindicatos, que ya lo avanzaron en la última reunión, y ahora también el ‘no’ de la patronal; lo que emplaza la negociación a una más que probable última reunión el lunes que viene, en la que los de Yolanda Díaz esperan acabar de cerrar el texto que luego remitirán al Congreso. No tiene allí, por el momento, los apoyos suficientes asegurados y negociación para la reducción de jornada a las 37,5 horas entrará ya en lógica netamente polítca.