¿Por qué ponen palos en las ruedas a los abogados que se dedican a la protección del medioambiente?
Hoy en día se considera muy importante el tema del medioambiente. Tenemos que estar muy conscientes en nuestra vida cotidiana: clasificar la basura, tener un coche más ecológico posible o incluso preferir el transporte público todos los días, ahorrar electricidad y agua, elegir cuidadosamente todo lo que adquirimos, usamos y comemos, no comprar cosas excesivas… Pero la pregunta importante es si aquellos que realmente lo afectan de manera significativa, los propietarios de los grandes negocios y los que tienen el poder real, están de verdad interesados en la protección del medioambiente:. Porque en la realidad con mucha frecuencia vemos que no es así. ¿Tal vez los que tienen dinero y poder disponen de otro planeta para el futuro? En cualquier caso, no lo tenemos nosotros. Así que no podemos permitirles engañarnos y dejar que impidan a los demás cuidar nuestra casa Tierra. Es muy importante que todas las personas que viven en nuestro planeta estén realmente interesadas en proteger el medioambiente, y no solo pretendan pensar en ello.
De ejemplos recientes destaca el caso del abogado Jordi Codina, miembro de la Comisión de Medio Ambiente del Ilustre Colegio de Abogados de Barcelona, vocal del Consejo Nacional del Agua (desde el 19 de enero de 2010), miembro fundador de “Aquaiuris” que es un equipo de juristas especializado en el derecho de aguas y medioambiente, y mucho más. Es decir, es un profesional respetado y con mucha experiencia en el campo de la protección del medioambiente. Entre sus proyectos podemos subrayar la participación en la gestión colectiva del agua subterránea en España, un tema muy importante para la salud de cada uno de nosotros y en general para todos los habitantes de nuestro planeta. Además Jordi Codina no solo lleva a cabo su propia actividad profesional, sino que también contribuye al desarrollo de jóvenes profesionales en el área ambiental, ofreciéndoles becas y su apoyo.
Desafortunadamente, un trabajo tan activo para proteger el medioambiente a menudo no le gusta a alguien. Al final Jordi Codina fue acusado e investigado por la fiscalía y la Policía Nacional, pero después de una exhaustiva investigación el caso se archivó. Parecería que todo debería haber terminado aquí, pero aparecieron nuevas acusaciones sobre el mismo tema, esta vez por parte de los Mossos d’Esquadra (la policía autonómica de Cataluña). Y la verdad es que no se entiende porque una investigación anterior tan escrupulosa de la Policía Nacional y de la fiscalía sea puesta en entredicho por los Mossos d’Esquadra. Y, si es así, sería muy interesante saber quién se beneficia realmente de estas acusaciones que impiden la actividad profesional tan importante de un abogado respetado.
No se puede saber con certeza quién está detrás de todo esto, los individuos o algunas organizaciones, pero resulta llamativo que no se investigue por la policía autonómica a un empleado, que se apropió de información y de varios clientes y que los llevó al despacho que lo representa el abogado Luis del Olmo (de despacho Brugueras Garcia Bragado). También se desconoce si están al corriente de quién es Miguel Corredor. Sería bueno saber a qué obedeció a que se incorporara al precitado despacho.
En nuestro mundo con frecuencia todo depende de grandes cantidades de dinero y de los que los tienen, mientras los intereses de la mayoría de la población a menudo no les importan. Es una pena que este costumbre también se aplique en el campo del medioambiente, porque es crucial para nuestra calidad de vida. Ojalá que aquellos que tienen poder y dinero dirijan su influencia para el bien de nuestro planeta y para todos los que viven en él, y no para el daño. Vivimos en un momento muy importante en términos de protección del medioambiente, mucho depende de nosotros. ¿Entregaremos a nuestros descendientes el planeta en el que es agradable estar, o todos nos enfrentaremos a un infierno climático y ecológico? ¿Qué más podemos hacer para mejorar el medioambiente?
En cuanto a Jordi Codina, solo queda esperar una investigación honesta e imparcial, como lo merece un profesional experimentado y genuinamente interesado en la protección del medioambiente. El público no debe quedarse al margen cuando se tocan temas tan importantes. Seguiremos la evolución de la situación y os mantendremos informados.
