La ministra de Derechos Sociales y Agenda 2023, Ione Belarra. EP
La elección del mal menor ha prevalecido. Unidas Podemos, ERC, EH Bildu, y otros partidos minoritarios han cedido al PSOE y acabarán aprobando la ley de bienestar animal, que excluye a los perros de caza, y la reforma del Código Penal que cambia las penas de cárcel a los maltratadores de animales por multas económicas. En plena crisis en el Gobierno por la reforma de la ley del ‘solo sí es sí’, el Ejecutivo sortea una nueva ruptura con el ‘sí’ a la norma, conseguido en el último momento y a duras penas, y evita una derrota en el Congreso.
Hasta el último minuto, con los diputados desfilando por la tribuna de la Cámara Baja, se ha mantenido la norma en el alambre. Más allá de mensajes velados y críticas al texto legislativo, al final, la mayoría del bloque de la investidura, en una aritmética parlamentaria endiablada, salvará las dos normas este jueves y permitirán que siga adelante la tramitación en el Senado. Es en este punto donde se han escudado algunas formaciones para dar su ‘sí’, en la nueva oportunidad que ofrece la Cámara alta para volver a intentar modificar la ley.
No obstante, todas estas formaciones han criticado duramente el paso dado por el PSOE al incluir, con el respaldo del PP, una enmienda que excluye a los perros de caza de la protección que ofrece la norma. Ni las amenazas de tumbar la ley, ni los intentos de última hora por revertir este cambio han hecho cambiar de posición a los socialistas.