“Así no”, “Si no para no pasa”, “Puente dimisión”, “Zamora, unida jamás será vencida” o el clásico “Si se puede” fueron los eslóganes coreados en la multitudinaria manifestación celebrada frente una estación de Zamora ese mediodía en defensa del mantenimiento de las frecuencias ferroviarias matutinas en la terminal de Sanabria AV.
La Policía Nacional había organizado un importante dispositivo con unidades antidisturbios para blindar la estación (no dejaban acceder siquiera a los aparcamientos sin billete) y evitar, sobre todo, una invasión de las vías, aunque ni por un momento hubo ni conato de una acción similar, por más que algún jovenzuelo estuviera indagando si había algún hueco por donde pasar hasta los raíles.
Los autobuses llegaban de Sanabria ovacionados por los lugareños de la capital que poco a poco fueron llenando los espacios de la rotonda de la estación, buscando un poco de sombra para protegerse a la canícula más veraniega que primaveral y que consiguieron alcanzar el entorno de las cinco mil personas. La Policía estima tres mil, pero teniendo en cuenta que Caja Rural repartió dos mil gorras y midiendo el espacio que ocupaba la protesta, la cifra de cinco mil almas parece más acorde con lo que allí estaba ocurriendo.
Llegaban los de Sanabria con sus pancartas: “Si el AVE no para lo paramos nosotros”, “Sanabria en lucha”, “Pueblos vivos con servicios públicos”, “Carballeda y Sanabria exigen sus derechos”, “Ninguna estación aislada” o “Sin tren al clarear nos toca emigrar”.
Los políticos eran de lo más madrugadores. La vicepresidenta autonómica, Isabel Blanco agitó el lema de la justicia territorial “basta ya de quitar servicios públicos para beneficiar a otras comunidades” en referencia a Cataluña. “Esto no es un error, es premeditado”, señaló la segunda de a bordo del Ejecutivo de Mañueco. El presidente de la Diputación, Javier Faúndez hablaba de “ataque frontal a los servicios públicos de la provincia de Zamora y además sin argumentos”. Señaló que la respuesta continuará con nuevas acciones a partir de la reunión convocada para el miércoles en la Diputación. “La sociedad zamorana está unida sin fisuras”.
Los parlamentarios del PSOE Antidio Fagúndez y José Fernández, este último alcalde de Puebla de Sanabria, indicaron que siguen trabajando para intentar revertir la situación y recuperar las paradas, pese a que de momento no se han conseguido avances, ni en Zamora ni en ninguna otra de las paradas afectadas, ya que ni Medina del Campo, ni Vilagarcía de Arousa, ni A Gudiña que están como Sanabria han logrado otra cosa que promesas y “soluciones” de parcheo consistentes en paradas fuera de hora o enlaces.
El presidente de la CEOE, José María Esbec, y el de la Cámara de Comercio, Enrique Oliveira, se ponunciaba en el mismo sentido.
Marea de gorras verdes de Caja RuralProtegidos por las gorras verdes que repartió Caja Rural la gente se aproximó hacia el estrado montado en el “fondo de saco” que queda entre el recinto ferroviario y la pista deportiva, junto a las verjas del espacio donde funcionó durante unos años en mercadillo.
Subieron las autoridades, incluido el alcalde, Francisco Guarido, sosteniendo la pancarta “El futuro de nuestros pequeños pueblos se escribe con las acciones del presente” al escenario donde el portavoz de la “Mesa de Trabajo por la mejora de los servicios ferroviarios en la ciudad y provincia de Zamora”, Pablo Novo, tomó la palabra para dar la bienvenida a los asistentes y explicar la situación y la cerrazón de Renfe frente a las alternativas propuestas desde Zamora, bien recuperar la parada ganando tiempo de viaje con los nuevos trenes bien establecer una suerte de madrugador.
Entre las propuestas elevadas al Ministerio de Transportes destacan la implementación del tren madrugador “Avant” destino Madrid con salida a las 06.00 horas de la mañana desde la estación de Sanabria AV y con parada en Zamora, Medina del Campo y Segovia, así como el incremento a dos frecuencias “ida y vuelta” diarias del servicio regional que une Sanabria, Carballeda, Aliste, Tábara, Tierra de Alba, Zamora y Toro con Valladolid.
El senador Blanco y el presidente de la Diputación Faúndez se pronunciaron en el mismo sentido: alternativas hay para recuperar las paradas perdidas o establecer trenes específicos, pero no se ve voluntad para afrontarlas.
Se bajaron los políticos del escenario para dar paso a los discursos principales, a cargo del presidente de la Asociación de Usuarios del AVE de Castilla y León, Carlos Perfecto, las componentes de la plataforma de viajeros de Medina del Campo, Pilar Franco e Isabel Hernández y el presidente de los Usuarios del AVE de Zamora, Álvaro Mayoral. Hablaron de cómo se “ha aplastado como una apisonadora a los más pequeños”, de las oportunidades que presenta el transporte ferroviario para trabajadores, estudiantes, mayores y enfermos más allá de ser un vehículo para la llegada de turistas, y, en definitiva como opción de futuro para Zamora y otros puntos de Castilla y León, que ven en el transporte rápido a Madrid una alternativa real para poder residir en sus lugares de origen aunque el trabajo lo tengan en la capital de España.
Los congregados aplaudieron y corearon eslóganes en distintos momentos de las alocuciones bajo un calor de justicia, mitigado en parte por el cielo enmarañado, pero aún así con muchos grados sobre las cabezas.
Poco a poco los manifestantes se fueron dispersando sin incidentes, conscientes de que “esto no se acaba aquí, es el principio del viaje” reivindicativo que va a ser largo. El promotor de la quedada de Sanabria de la semana anterior, el dirigente agrario José Manuel Soto, arengó también a los pocos manifestantes que quedaban, con un discurso más enardecido que el de sus predecesores.
Este próximo lunes 9 de junio, por cierto, se consuma el desastre y entran en vigor los nuevos horarios. La lucha continúa para ver si el 1 de octubre, cuando entren en vigor los nuevos horarios, hay posibilidad de meter al menos un tren por sentido a primera hora con las paradas reclamadas por los denominados “destinos intermedios”.