Más de la mitad de las viviendas que actualmente se ofertan en alquiler en la provincia de Málaga presentan un precio superior a los 1.500 euros mensuales, según un análisis de mercado publicado este lunes por el portal Pisos.com. A nivel provincial, cuatro provincias destacan por concentrar más de la mitad de su oferta de alquiler en el segmento de más de 1.500 al mes. Baleares lidera el ranking con un 86% de los inmuebles que superan esta cifra, seguida de Barcelona (76%), Madrid (62%) y el citado caso de Málaga (56%).
A nivel nacional, las viviendas en alquiler con precios superiores a los 1.500 euros mensuales el 37% de las viviendas en alquiler. El estudio está elaborado a partir de los valores de oferta de las casas que se anuncian en el portal Pisos.com.
En el caso de la provincia de Málaga, la distribución de inmuebles en alquiler por franjas de precio es la siguiente: tras el 56% de casas que supera los 1.500 euros al mes aparece una franja intermedia de entre 1.000 y 1.500 euros que reúne a otro 25% de la oferta. Luego hay otro 16% que se mueven entre los 700 y 1.000 euros mensuales. Finalmente, en el extremo más asequible, solo el 3% de las viviendas en alquiler tiene un precio inferior a los 700 al mes lo que, según el portal Pisos.com, «evidencia la escasez de oferta en el segmento más económico del mercado».
«La polarización del mercado de alquiler refleja una España a dos velocidades: mientras en las grandes capitales y zonas turísticas los precios se han disparado por encima de los 1.500 euros, en amplias regiones del interior todavía es posible encontrar vivienda por menos de 700 euros mensuales», comenta el director de Estudios de pisos.com, Ferran Font. Es el caso, por ejemplo, de Jaén, con un 83% de viviendas por debajo de esos 700 euros al mes.
Diferencias muy marcadasEl mercado del alquiler en España presenta así diferencias muy marcadas en función de la ubicación geográfica. Madrid y Cataluña presentan un patrón similar. En la comunidad madrileña, el 62% de los alquileres supera los 1.500 euros mensuales y no existe ninguna vivienda por debajo de los 700 euros, mientras que solo el 7% se encuentra en la franja de 700 a 1.000 euros. En Cataluña, el 68% de los inmuebles cuesta más de 1.500 euros al mes, con apenas un 3% por debajo de los 700 euros y un 8% entre 700 y 1.000 euros.
«La brecha entre provincias costeras y turísticas y las del interior es cada vez más pronunciada. Mientras en Barcelona o Baleares resulta casi imposible encontrar alquiler por menos de 1.000 euros, en buena parte de Castilla y León, Extremadura o Castilla-La Mancha la mayoría de la oferta se concentra en los segmentos más asequibles», explica Font.
Capitales de provincia: la polarización se acentúa¿Y qué ocurre a nivel de capitales? El análisis de Pisos.com confirma y acentúa esta polarización. En el segmento de más de 1.500 euros mensuales, Palma de Mallorca lidera con un impactante 89% de los alquileres que superan esta cifra, consolidándose como la capital más cara para alquilar vivienda en España. Barcelona ocupa la segunda posición (81%), seguida de Madrid (65%), Valencia (45%) y Bilbao (44%).
En este caso, Málaga capital presenta un porcentaje del 30% del total de su oferta por encima de los 1.500 euros mientras que otro 47% está en la franja de entre 1.000 y 1.500 euros. Luego hay otro 22% que se mueven entre los 700 y 1.000 euros mensuales y, un 2% con un precio inferior a los 700 al mes.
En el segmento más asequible, varias capitales mantienen una amplia oferta por debajo de los 700 euros mensuales. Zamora y Jaén empatan en el primer puesto con un 71% de los alquileres que cuestan menos de 700 euros. Le siguen Palencia (50%), Huelva (47%) y Badajoz (43%).
«Las capitales provinciales reproducen a escala local la misma dinámica que vemos a nivel nacional. Las grandes urbes y las capitales turísticas concentran los precios más altos, mientras que las ciudades medias del interior ofrecen opciones mucho más asequibles. Esta realidad está condicionando cada vez más las decisiones de movilidad geográfica de muchos españoles», concluye Font.