El empresario malagueño Manuel Baena Ramos, fundador de la conocida compañía de materiales de fontanería, baños y climatización Proinco, falleció este pasado lunes 9 de diciembre a los 86 años de edad. Baena había celebrado precisamente este pasado verano, junto a su familia, el acto de aniversario de los 50 años de la creación de Proinco, que cuenta ya con 17 puntos de venta repartidos por varias provincias andaluzas y una plantilla formada por unos 230 empleados. Los hijos de Manuel Baena (Francisco José, Rocío y Javier) se vienen encargando desde hace años de la gestión de la compañía, aunque él, ya jubilado, se dejaba caer por la sede de la compañía siempre que podía para ofrecer sus consejos.
La vida de Manuel Baena, cuyo funeral se celebró el martes en Parcemasa (ese mismo día todos los puntos de venta de la compañía permanecieron cerrados en señal de duelo), fue la de un empresario hecho a sí mismo. Con apenas 20 años, decidió buscarse la vida entre finales de los 60 y principios de los 70 trabajando en los puestos más básicos de empresas dedicadas a la venta de materiales relacionados con la fontanería. Más tarde pasó a ser comercial, recorriendo largas distancias montado en una pequeña moto por toda la costa coincidiendo con el nacimiento del boom turístico.
Una trayectoria de esfuerzo e ingenio«Mi padre viene de una familia con pocos recursos que lo pasó muy mal en la posguerra. Esa falta de recursos hizo que supliera con mucho ingenio, sacrificio y esfuerzo sus inicios en el sector», contaba el pasado mes de octubre a este periódico el actual gerente de Proinco, Francisco José Baena, con motivo del Premio Empresa concedido por La Opinión de Málaga en sus galardones de este año.
Casado con Carmen Mira y ya con una familia de la que tirar, Baena decidió en aquellos años dar el paso e independizarse, creando Proinco en 1974 junto a un compañero de su propia empresa de suministros industriales. Los inicios fueron difíciles pero rápidamente empezaron a crecer. Sin embargo, en 1986 ambos socios separaron sus caminos, quedándose Manuel Baena con la parte de fontanería pura.
Las primeras instalaciones de Proveedora a la Industria y Construcción SA, situadas en la calle Constancia, dieron paso a una sede en el polígono de El Viso de la que luego, a su vez, se dio el salto al actual edificio del polígono del Guadalhorce, muy visible por su característica fachada de espejo. Uno de los pilares del crecimiento de Proinco fue el acceso a la distribución de los productos de Roca.
Fontanería, baño, calefacción y aire acondicionado, piscina, riego, o energía solar son algunos de los segmentos que cubre actualmente Proinco, que vende tanto a profesionales como a particulares y que tiene el foco puesto en seguir liderando este mercado con nuevos proyectos que le permitirán seguir creciendo.
Entre ellos, figura la ampliación de su centro logístico de Antequera, unas instalaciones que contarán con una superficie de cerca de 10.000 metros cuadrados y con las que Proinco reforzará el permanente compromiso de servicio al cliente, caracterizado por las entregas inmediatas gracias a su capacidad de almacenaje.
La gala de los 50 años, una día de enorme felicidadProinco celebró el pasado mes de junio la gala de su 50 aniversario en la Hacienda Nadales, que contó con la presencia de cerca de 1.000 asistentes y que Manuel vivió como una jornada de enorme felicidad.
«El día del aniversario disfrutó muchísimo, estaba pletórico y todo el mundo lo recuerda así, fue un homenaje muy bonito para él», rememora a este periódico su hija Rocío, directora de Comunicación y Marketing de Proinco. Málaga despide a uno de los grandes representantes de su tejido empresarial.
Manuel Baena, en la gala del 50 aniversario de Proinco, celebrado este pasado verano en Málaga. / Proinco