La macronista Yaël Braun-Pivet ha sido reelegida este jueves como presidenta de la Asamblea Nacional francesa con 220 votos tras una larga sesión de más de cinco horas. Con esta reelección, el presidente Emmanuel Macron gana su primera batalla contra la izquierda en un momento político clave, a la vez que incierto, y demuestra que el macronismo tiene más apoyo parlamentario del que en un inicio muchos creían.
«La democracia es un bien preciado. Nuestras decisiones, nuestras acciones pueden cambiar la vida de los franceses, y así lo han hecho saber. (…) Tendremos que entendernos, cooperar y ser capaces de encontrar un compromiso y dialogar», afirmó Braun-Pivet tras ser escogida. La política centrista renueva así su presidencia tras vencer a André Chassaigne, del Nuevo Frente Popular, que recibió 207 votos, y al candidato de Reagrupamiento Nacional, Sébastien Chenu, que recogió 141.
Ahora, Braun-Pivet deberá enfrentarse a un importante reto como presidenta: dirigir una Cámara parlamentaria sin mayorías claras que podría mantener a Francia en el bloqueo político e incluso obligar al presidente a convocar de nuevo elecciones legislativas el próximo año. Unas divisiones que ya se han podido ver durante la primera sesión de la XVII legislatura, cuando los diputados de izquierdas se acercaban al estrado para depositar sus votos y negaban el saludo al diputado más joven de extrema derecha, Flavien Termet, encargado de recoger las papeletas.
En este primer día de legislatura, los diputados debían sentarse por orden alfabético, algo que ha creado incómodas situaciones entre compañeros de escaños, como es el caso del diputado de La Francia Insumisa Antoine Léaument. «Si tenéis un mal día, recordad que voy a pasar el mío sentado junto a Marine Le Pen», afirmó el diputado insumiso en la red social X.
La primera mujer presidenta renueva el cargoYaël Braun-Pivet, abogada penalista y primera mujer presidenta de la Asamblea Nacional, es una antigua militante socialista que se unió al partido de Macron en 2016, y un año después consiguió el puesto de presidenta de la Comisión de Leyes de la Asamblea (2017-2022). También fue ministra de los Territorios de Ultramar, cargo que abandonó para postularse a la candidatura a la más alta función de la Asamblea.
En busca de la coalición o la mayoría legislativaEn esta primera sesión, el diputado de más edad, José González (Reagrupamiento Nacional), de 81 años, junto con los seis miembros más jóvenes del hemiciclo han sido los encargados de presidir la sesión. González, veterano francoalgerino, en 2022 ya protagonizó un polémico discurso mencionando a Algeria, y en esta sesión no ha perdido la oportunidad de volverlo a hacer generando un cierto murmullo en la Cámara: «Francés nacido bajo el sol de otro continente que aprendió, a través de su desarraigo desgarrador, el significado de la palabra patria».
Una vez escogida la presidencia, este viernes le tocará el turno al resto de la mesa, que está compuesta por seis vicepresidentes, varios magistrados y secretarios. Sus funciones van desde modificar reglamentos hasta evaluar las propuestas legislativas.
Ahora, con una presidenta de la Asamblea Nacional de su bando, Macron tendrá que superar el siguiente escollo; buscar una coalición o una mayoría legislativa para poder gobernar y sacar adelante medidas de gran calado, como los Presupuestos del Estado.