La Costa del Sol comienza su temporada de playas, en la que recupera en algunos de sus municipios las duchas tras el fin de las restricciones por la sequía gracias a las abundantes lluvias registradas los meses pasados, aunque otras ciudades solo tendrán lavapiés.
En concreto, volverán a abrirse las duchas en las playas de la capital malagueña y de municipios de la Costa del Sol Occidental como Marbella, Torremolinos, Benalmádena, Fuengirola o Estepona.
Por el contrario, en el litoral oriental solo se habilitarán los lavapiés en las localidades de Rincón de la Victoria, Vélez-Málaga, Algarrobo y Torrox.
Los ayuntamientos que sí han decidido habilitar las duchas en la zona Occidental especifican, en bandos municipales, que deben ser con sistemas de pulsador de tensión o temporizador, para evitar consumos prolongados, y además hacen un llamamiento a la «responsabilidad» en el gasto de agua.
Málaga capitalEn el caso de la capital de Málaga, el Ayuntamiento levantó todas las restricciones al uso de agua potable que estaban activas por la sequía ante la mejora de la situación hidrológica, lo que supone, entre otras medidas, que las duchas en las playas estarán en servicio desde este domingo.
Las cuencas mediterráneas andaluzas, en las que se incluye Málaga, recuperaron en marzo casi la normalidad en el suministro de agua, gracias a las lluvias del año hidrológico, que han permitido recuperar una gran parte de las reservas en los embalses.
La Costa del Sol Occidental pasó a disponer de un máximo de 250 litros por habitante y día, mientras que en la comarca de la Axarquía y Málaga capital cuentan con 225 litros.
Situación más complicadaLa situación de la Axarquía, comarca productora de subtropicales, siempre ha sido la más complicada en la situación de sequía y por ello los alcaldes del litoral oriental han optado por mantener las duchas cerradas un año más en sus más de 50 kilómetros de playa, aunque este verano tendrán los lavapiés activados.
La empresa pública de Aguas y Saneamiento de la Axarquía, Axaragua, convocó una reunión con los responsables públicos y recomendó a esos ayuntamientos abrir solo los lavapiés de las playas y mantener las duchas cerradas, como «medida preventiva».