La Sección Cuarta de la Audiencia de Barcelona ha confirmado la decisión del juzgado de Primera Instancia 39 de Barcelona de denegar la suspensión provisional de la difusión de ‘El odio’, de la editorial Anagrama, escrito por Luisgé Martín a partir de cartas que se intercambió y una entrevista que tuvo en prisión con José Bretón condenado por el asesinato de sus dos hijos en Córdoba en 2011. La Fiscalía había pedido que el libro no se distribuyese en las librerías al poder vulnerar el derecho a la intimidad de las víctimas y de su madre, según su contenido.
Como ya hizo el juzgado de primera instancia, el tribunal ha vuelto a rechazar la petición de la Fiscalía de no difundir la obra, que estaba prevista que llegase a las librerías el 26 de marzo, pese a que la editorial decidió suspenderla por la polémica generada. La Audiencia de Barcelona consideraba que el objetivo de la petición de la Fiscalía era garantizar la protección de derechos de las víctimas mientras se decide si presenta una demanda tras examinar la obra, por lo que solicitaba la paralización de la publicación del libro.
En este sentido, la Fiscalía de Barcelona quería ver el contenido antes de presentar una posible demanda «basada en la intromisión en el derecho al honor, a la intimidad personal y familiar y a la propia imagen» de la exmujer y los hijos de Bretón. Sin embargo, para la Audiencia de Barcelona considera que la solicitud “ha sido presentada previamente a la interposición de demanda, con base en la inminente publicación del libro, que estaba prevista para el pasado día 26 de marzo de 2025, y con la referida finalidad de estudiar si se presenta o no una demanda, de forma que la medida es solicitada sin venir anudada a ninguna demanda, presente o futura”.
Por eso, el tribunal añade que, «aunque entendemos comprensible la sensibilidad del Ministerio Fiscal dadas las circunstancias» por ser derechos fundamentales relacionados con menores, no puede estimar la medida cautelar al no ir acompañada de una demanda contra el autor o la editorial para evitar la difusión del libro. “No se puede ser ajeno a las circunstancias que rodean este incidente ni a la especial protección que merecen las víctimas, pero la legislación procesal civil no contiene mecanismos que permitan acceder a la petición formulada por el Ministerio Público de conformidad con los razonamientos expuestos», concluye el tribunal.
En este sentido añade que «la finalidad concreta de la solicitud cautelar no es asegurar la eficacia de una eventual sentencia estimatoria declarante la existencia de una intromisión ilegítima” sino examinar el texto para decidir si se presenta o no la demanda. La legislación civil establece que las medidas cautelares, como la distribución de la obra, debe ir acompañadas de una reclamación judicial y que, en este caso, «no consta, cuando menos, contra quien iría dirigida la eventual demanda: si contra la editorial, contra el autor del libro, o bien contra los dos”.
El pasado 27 de marzo la editorial Anagrama comunicó su decisión de suspender voluntariamente la distribución del libro ‘El odio’, de Luisgé Martín, ‘sine die’ pese a la denegación del juzgado de primera instancia de las medidas cautelares reclamadas por la Fiscalía.