El secretario general de Junts, Jordi Turull, ha querido dejar claro este viernes el posicionamiento de su partido frente a la opa de BBVA a Sabadell, después de la estupefacción generada por el voto a favor de Pere Soler, nombrado a instancias de la formación en la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). «Nos oponemos sin matices, del todo [a la opa]», ha subrayado Turull en declaraciones a la prensa delante de la sede de Junts. Además, ha exigido al Gobierno de Pedro Sánchez que no autorice la operación cuando la cuestión llegue a la mesa del Consejo de Ministros en los próximos días.
El nombramiento de Soler a finales de 2024 había sido interpretado como una maniobra de los posconvergentes para reforzar las opciones del Banco Sabadell de evitar la opa, ya que Junts se había posicionado hace un año, durante la campaña electoral de las elecciones catalanas, en contra de la operación. Sin embargo, Soler, que fue director general de los Mossos d’Esquadra cuando se celebró el referéndum del 1 de octubre de 2017, votó a favor de permitir la opa y permitió que la decisión se adoptara por unanimidad.
Lejos de desautorizar a su fichaje, el ‘número dos’ de los posconvergentes ha defendido la laboral realizada por Soler, con el argumento de que había logrado endurecer las condiciones iniciales. Además, Turull ha asegurado que introdujo unas modificaciones en el texto inicial que dan «fundamento jurídico» y «ampara legal» al Ejecutivo central para oponerse a la operación bancaria. «Es el momento de la política», ha remarcado, instando a Sánchez a posicionarse y subrayando que tanto el informe como la ley le permiten no autorizar la opa.
Junts defiende que, si finalmente se acaba produciendo la fusión de las dos entidades bancarias, las condiciones que la CNMC impone al BBVA, a instancias de Soler, también serían más beneficiosas para las pymes catalanas. Según la formación independentista, un voto particular de su consejero en el organismo no habría servido de nada a nivel práctico. En concreto, los posconvergentes defiende que Soler ha impuesto que se mantenga el crédito en aquellas pymes que tengan el 85% o más de su financiación en manos de los dos bancos, así como también que se mantenga el volumen de crédito total de las pymes cuya cuota agregada del crédito de los dos bancos sea al menos del 50%, algo que sería vigente en Cataluña y Baleares.
Pero, al margen de esta circunstancia, Turull ha pedido no «esconderse en informes técnicos» y ha defendido que Catalunya «no puede perder ni un banco más», por lo que ha exigido a Sánchez que pare la fusión. También ha aprovechado la ocasión para criticar el papel del president Salvador Illa en este asunto. El secretario general de Junts ha tachado de «grave» que Illa no haya hecho aún ningún «posicionamiento» y le ha acusado de no actuar a la espera de lo que decida el Gobierno. «Liderar quiere decir posicionarse», ha remachado.
Después del informe de la CNMC autorizando la operación, un año después de la oferta del BBVA al Sabadell, el ministro de Economia, Carlos Cuerpo, tiene 15 días laborables para decidir si eleva el asunto al Consejo de Ministros. Si lo hace, el Gobierno tiene un mes de plazo para decidir si la aprueba con las condiciones fijadas por la CNMC o si le impone criterios adicionales. En caso de que el Ejecutivo estableciera exigencias más duras, el BBVA podría acabar retirándose de la operación.
