El ambiente en ‘Espejo Público’ se caldeó durante la emisión de este martes 12 de noviembre, cuando Gonzalo Miró y Susanna Griso mantuvieron un acalorado debate sobre la gestión de la DANA y el papel de la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera. La discusión surgió tras una entrevista de Griso con Alberto Núñez-Feijóo, en la que se mencionó la actuación de Carlos Mazón y la reacción del Gobierno central.
Al ser consultado sobre las declaraciones de Feijóo, Gonzalo Miró no escatimó en palabras: “Esperables y poco sorprendentes, entran dentro de la táctica cuando su político de cabecera en la zona está políticamente muerto y es un cadáver. Está intentando que caiga alguien más, a ver si pueden arramplar a alguien más”, comentó sin rodeos. El colaborador sostuvo que era injusto cargar toda la responsabilidad sobre Ribera, y añadió: “Lo que pasa es que centrar el tiro en Teresa Ribera no sé si es demasiado acertado porque no sé hasta qué punto tenía una capacidad de decisión aquella misma tarde para que no ocurriese lo que ocurrió”.
La respuesta de Susanna Griso no se hizo esperar. La presentadora señaló: “Estaba el presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar en esa reunión y tampoco parece que advirtiese de que el barranco del Poyo se estaba desbordando porque toda la atención estaba en la presa de la Forata”.
Miró, firme en su postura, defendió que la ministra Ribera no tenía la autoridad para tomar decisiones de emergencia en ese momento: “Pero centrar la culpabilidad en Teresa Ribera implica que ella esa misma tarde por mutuo propio podía haber tomado una decisión que evitase lo que pasó, que yo sepa eso no es así. No tenía esa competencia”, reiteró.
La conversación se tensó aún más cuando Griso insistió: “Podía haber advertido en un lenguaje menos administrativo de lo que estaba pasando, tenía ahí a su director de la confederación, insisto”. A lo que Miró respondió tajantemente: “Pensar que Mazón no sabía lo que iba a pasar porque no le habían avisado… yo eso no lo voy a comprar. No sé si hay alguien que se lo cree, yo desde luego que no”.
En un momento álgido, Miró cuestionó las muestras públicas de agradecimiento de Mazón hacia el presidente tras la DANA: “¿Por qué no recordamos cuántas veces dio las gracias Mazón al presidente al día siguiente de la DANA? ¿Qué le agradecía? Si el Gobierno lo había hecho tan mal, ¿por qué le agradecía tanto el comportamiento del Gobierno con la Generalitat?”. Griso, segura de sí misma, replicó: “Bueno, porque ellos pactaron en ese momento no hacerse daño mutuamente y el pacto duró poco”.
El intercambio concluyó con Griso respondiendo a la insistente pregunta de Miró: “¿No era verdad entonces?”. La presentadora fue clara: “No, no era verdad. Mazón no estaba agradecido al presidente porque consideraba que tenía que haber más efectivos en Valencia”.
Para cerrar, Griso planteó una cuestión que dejó la conversación en un punto crítico: “Dicho esto, ¿tú crees que es normal que esté desaparecida Teresa Ribera, salvo en una entrevista en la Cadena SER, durante los 14 días de esta crisis y que el presidente de la Confederación Hidrográfica no haya dado la cara?”. Miró no retrocedió y respondió: “Insisto, la máxima competencia era de Mazón. Entiendo que esto se trata de ir disparando a todo el mundo para diversificar la responsabilidad, pero es que la competencia con los avisos que se habían dado era del presidente de la Generalitat nos pongamos como nos pongamos”.