El Real Madrid ha cancelado o reprogramado todos los conciertos en su estadio Santiago Bernabéu y está trabajando para cumplir con las normas municipales sobre ruido después de que los vecinos se quejaran de que una serie de conciertos ruidosos y tardíos habían convertido el recinto en un «torturadismo».
Aunque es más conocido por ser el estadio de uno de los mejores equipos de fútbol de España, el Bernabéu, que acaba de ser sometido a una remodelación que ha costado 900 millones de euros (760 millones de libras esterlinas) y que ha llevado cinco años, ha acogido una serie de conciertos de alto perfil durante la primavera y el verano. Entre los últimos cabezas de cartel se encuentran Taylor Swift, Luis Miguel y la estrella colombiana Karol G.
Pero, aunque los conciertos deleitaron a algunos aficionados a la música, llevaron a la desesperación a muchos vecinos. Ante los decibelios que superaban con creces los límites legales, la hora de finalización de los conciertos a medianoche, los aficionados acampando en los parques locales, los borrachos orinando en los portales y el bloqueo de las calles residenciales, un grupo que representa a los vecinos del entorno del estadio inició acciones legales contra los responsables, incluido el Ayuntamiento de Madrid.
En un comunicado publicado el sábado, el club dijo que había decidido repensar su programación de conciertos.
“El Real Madrid CF comunica que ha decidido aplazar provisionalmente la programación de eventos y conciertos en el estadio Santiago Bernabéu. Esta decisión se enmarca en el conjunto de medidas que está adoptando el club para garantizar que los conciertos se ajusten estrictamente a la normativa municipal vigente”, indica el comunicado.
A pesar de la introducción de medidas de insonorización, «diferentes organizadores y promotores» todavía tienen dificultades para cumplir con las normas municipales sobre ruido, según el comunicado.
Y añadió: “El Real Madrid seguirá trabajando para que se den las condiciones de producción y emisión de sonido necesarias para permitir la celebración de conciertos en nuestro estadio”.
El comunicado indica que los conciertos de los artistas españoles Dellafuente y Aitana, previstos para noviembre y diciembre, serán reprogramados, al igual que los conciertos del próximo mes de marzo de Lola Índigo. Un concierto de K-pop previsto para octubre ha sido cancelado.
El club explicó que sigue planificando un gran número de espectáculos y eventos para aprovechar al máximo el renovado estadio, pero añadió: «El Real Madrid seguirá trabajando con la Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de Madrid en materia de sostenibilidad y convivencia, y su objetivo es siempre que las actividades del estadio estén a la altura de su compromiso con la ciudad de Madrid y sean beneficiosas para el entorno».
José Manuel Paredes, portavoz de la asociación que se formó en respuesta al ruido del concierto, dijo que el anuncio había sido un alivio temporal para quienes estaban alrededor del estadio, pero enfatizó que el grupo no había abandonado su acción legal.
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“Hemos conseguido que la situación en el barrio no empeore durante al menos seis meses, por lo que la situación está mejorando”, afirma. “Pero eso no significa que dejemos de luchar. El problema sigue siendo que el estadio no está equipado para ser un recinto de conciertos, ni lo estará”.
Paredes dijo que el Bernabéu sólo tenía licencia del ayuntamiento para celebrar encuentros deportivos y algún que otro “evento extraordinario”, y no estaba previsto para albergar conciertos frecuentes.
“Sólo necesitamos que cumplan la ley, ni más ni menos”, dijo.