El Consejo de Ministros celebrado este lunes ha aprobado desclasificar los documentos del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) sobre los atentados yihadistas de Barcelona y Cambrils en 2017. La medida, impulsada por el ministerio de Defensa, se ha producido tan solo unos días después de que se realizase esta solicitud por parte del Congreso, pactada con Junts, como había avanzado este diario. Según confirman fuentes de Moncloa, se ha producido a la desclasificación de todos los documentos solicitados.
Desde el departamento que dirige Margarita Robles siempre insistieron en su voluntad de cumplir con esta exigencia, pero justificaron su retraso porque hasta la pasada semana no se había producido una petición formal. La comisión del Congreso que investiga “el derecho a saber la verdad y las implicaciones derivadas” de estos atentados, creada como fruto del acuerdo de investidura del PSOE con Junts, se reunió el próximo 17 de diciembre y entonces se pudo avanzar en esta reordenación de los trabajos para elevar la petición.
Los independentistas siempre exigieron investigar las informaciones sobre que el imán de Ripoll habría sido confidente de los servicios de inteligencia hasta el día de los atentados y esclarecer estos hechos. Los socialistas no estaban al frente del Gobierno cuando sucedieron los atentados, pero recuerdan que el anterior director del CNI, Félix Sanz Roldán, ya dio explicaciones en la comisión de Secretos Oficiales y dio todas las explicaciones pertinentes.
Además de la comisión sobre los atentados, los socialistas ya decidieron reactivar el pasado mes de septiembre las otras dos comisiones pactadas los independentistas catalanes en la investidura: la relativa a la denominada ‘Operación Cataluña y la de Pegasus.
En el Gobierno asumen que Junts exige garantías de cumplimientos pendientes para abordar la carpeta de los Presupuestos. Este mismo jueves, Pedro Sánchez se comprometió a celebrar una reunión tanto con Carles Puigdemont como con el presidente de ERC, Oriol Junqueras.
Reunión con PuigdemontAlgo que ya había garantizado antes, pero que ahora se ha vuelto a subrayar ante esta exigencia pública del expresident. Puigdemont entiende que sin esta foto no hay “amnistía política”, y ante ello Sánchez ha abierto la puerta a que dicha cita se produzca antes de la aplicación de la amnistía por parte de los jueces. Para justificarlo, el jefe del Ejecutivo se ha apoyado durante su comparecencia de balance del año en que la amnistía “a afectos políticos ya se aplica, incluso por parte del PP, que vuelve a votar conjuntamente con Junts”.
En el Ejecutivo aseguran que avanzan en otras negociaciones pendientes con los posconvergentes que ponen como requisito para sentarse a negociar la carpeta de las cuentas públicas, como es el caso de la transferencia de las competencias en inmigración. Sin embargo, reconocen que la última palabra para cerrarlos corresponde a Junts. Mientras, se multiplican los guiños. Este mismo mes de enero está prevista la celebración de una Junta de Seguridad entre la Generalitat y el Ministerio del Interior para que los Mossos asuman las competencias de seguridad ciudadana de puertos y aeropuertos.