El Louvre y otros museos de todo el mundo, así como las joyerías más reputadas, han sido objeto de atracos de lo más diverso en las ficciones cinematográficas. Seleccionamos cinco películas curiosas sobre robos imaginados o muy reales.
Después de la producción italiana ‘Rufufú’, esta es una de las obras fundacionales del cine europeo de robos y atracos. La dirigió el estadounidense Jules Dassin en Francia, donde se instaló huyendo de la caza de brujas anticomunista. El esquema es el clásico, heredado en los filmes de ‘Ocean’s eleven’: un hombre sale de la cárcel y quiere reintegrarse, pero carece de dinero y vuelve a delinquir. Con su antigua banda prepara el atraco a una de las joyerías más importantes y bien protegidas de París.
Uno de los títulos más originales en cuanto a los filmes sobre robo de obras de arte, ya que le da la vuelta por completo al esquema tradicional y convierte a los ladrones en héroes. Dirigida por John Frankenheimer e interpretada por Burt Lancaster, la película muestra como unos miembros de la resistencia francesa intentan apoderarse del tren que, cuando las tropas aliadas cercan la ciudad de París, transporta los valiosos cuadros de arte moderno que el Tercer Reich ha expoliado durante la ocupación.
En la primera versión, ‘El caso de Thomas Crown’ (1968), el protagonista robaba casi tres millones de euros de un banco de Boston. En la segunda, ‘El secreto de Thomas Crown’, con Pierce Brosnan y Rene Russo en los papeles originales de Steve McQuenn y Faye Dunaway, el ladrón sustrae un lienzo de Claude Monet, valorado en 100 millones de euros, del Museo de Arte Contemporáneo de Nueva York. El filme juega al gato y al ratón entre el sofisticado atracador y la investigadora de la compañía se seguros.
Aunque parezca una ficción delirante, el argumento de la películas realizada por Fernando Colomo es tan real como la vida misma: el pintor malagueño Pablo Picasso y el poeta, dramaturgo y crítico de arte franco-polaco Guillaume Apollinaire, representantes de las vanguardias de principios de siglo, fueron detenidos como principales sospechosos en el robo de ‘La Gioconda’ de Leonardo da Vinci perpetrado en 1911 en el hoy estigmatizado Louvre. La sustrajo un exempleado del museo, Vincenzo Peruggia.
En su habitual estilo vertiginoso, Danny Boyle mezcló comedia e intriga en la peripecia de un empleado de una casa de subastas (James McAvoy) que planea con una banda de criminales el robo de un cuadro de Goya. El problema reside en que se da un golpe en la cabeza, olvida donde ha escondido la pintura y el líder de la banda (Vincent Cassel) contrata a una terapeuta (Rosario Dawson) para que le ayude a recuperar la memoria. Un divertimento a costa del ‘Vuelo de brujas’ pintado por Goya en 1797.
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