Con el voto por correo y la posibilidad, en algunos estados, de ejercer el sufragio anticipado, los estadounidenses pueden ya participar en los comicios que decidirán quién será el nuevo presidente del país, aunque la jornada electoral como tal se celebrará el próximo martes 5 de noviembre.
La fecha viene determinada por una norma del siglo XIX, que establece que las elecciones presidenciales en Estados Unidosdeben celebrarse el martes posterior al primer lunes de noviembre, una tradición que se ha mantenido hasta hoy invariable.
Esta es sólo una de las peculiaridades de un proceso electoral muy distinto al español, aunque la diferencia más importante radica quizás en el método de elección, un sistema de sufragio indirecto en el que el candidato ganador en un estado se lleva todos los representantes de ese territorio, aunque haya ganado por un solo voto. Esta circunstancia y la igualdad en el voto popular que arrojan las encuestas hacen presagiar unos comicios muy disputados que podrían decidirse en un puñado de estados.
Varias personas votan en las elecciones de EEUU en 2020. / EFE
Kamala Harris y Donald Trump, dos visiones antagónicas¿Y qué eligen los estadounidenses al decantarse entre los dos candidatos, la demócrata Kamala Harris y el republicano Donald Trump? En juego están cuestiones esenciales que tienen que ver con la economía, los derechos sociales, la inmigración y el resto de los asuntos de la política nacional, pero más allá de la proyección que esa decisión tiene para el resto del planeta, las elecciones también determinarán el papel de EEUU en el mundo, justo en un momento en el que las tensiones bélicas se han multiplicado por la ofensiva de Rusia contra Ucrania y el agravamiento del conflicto en Oriente Próximo.
En las urnas se medirán dos visiones antagónicas de la forma de hacer política, de la economía y de la sociedad. En el caso del candidato republicano, Donald Trump, han reaparecido en su discurso gran parte de los mantras que ya le auparon a la Casa Blanca en 2017, comenzando con su eslogan de cabecera: ‘Make America great again’ (cuya traducción, a veces discutida, viene a ser algo como ‘Hagamos (o haz) América grande otra vez’).
El programa republicano en las elecciones de EEUUPero más allá del lema de campaña, el programa electoral del Partido Republicano que enarbola la candidatura de Donald Trump recoge sus principales propuestas. Estas son algunas de las promesas más destacadas:
-En una retórica antiinmigración, propone «detener la invasión migrante» en Estados Unidos y «llevar a cabo la operación de deportación más grande de la historia» del país, además de la construcción de un gran escudo antimisiles.
-«Poner fin a la inflación» y convertir a Estados Unidos en una potencia energética mundial.
-En política exterior, «prevenir la Tercera Guerra Mundial, restaurar la paz en Europa y en Oriente Próximo».
-Construir «un gran escudo defensivo contra misiles» en Estados Unidos al estilo de la Cúpula de Hierro israelí y «deportar a radicales pro-Hamás» que participen en protestas universitarias.
Donald Trump, durante un mitin. / EFE
-«Acabar con los cárteles de drogas extranjeros y aplastar la violencia de las pandillas», además de modernizar el Ejército estadounidense para que sea «el más fuerte y poderoso del mundo».
-En economía, mantener el dólar estadounidense como la principal divisa mundial y evitar recortes en el programa de salud pública Medicare.
-En educación, el programa amenaza con recortar la financiación federal a los colegios que hablen sobre racismo y sobre identidad de género porque cree que se trata de contenidos «inapropiados» para los niños.
-El programa se posiciona en contra de que las mujeres trans puedan participar en competiciones deportivas femeninas.
-En cuanto al aborto, el programa electoral del Partido Republicano ha optado por excluir las referencias a la prohibición de la interrupción del embarazo. Trump defiende que cada estado debe poder legislar sobre este asunto.
-El programa también promete proteger la «integridad de las elecciones», una referencia que conecta con sus teorías sobre presuntos fraudes electorales.