Un tribunal de Francia ha ratificado este miércoles la condena a un año de cárcel contra el expresidente Nicolas Sarkozy por financiación ilegal de su campaña electoral a la Presidencia en 2012, en un proceso abierto tras su apelación a la sentencia dictada contra él en 2021.
Así, el tribunal ha considerado probado que el exmandatario fue informado de la situación en torno a las facturas de su campaña, especialmente en lo relativo a la organización de sus mítines, antes de agregar que seis de los meses de la condena quedan suspendidos.
Por su parte, Jérome Lavrilleux, ex director adjunto de la campaña de Sarkozy y otro de los juzgados en el marco del caso ‘Bygmalion’, ha sido sentenciado a dos años de cárcel, con 18 meses suspendidos, según las informaciones recogidas por la cadena de televisión francesa BFM TV.
Asimismo, el ex director de campaña del antiguo mandatario, Guillaume Lambert, ha sido condenado igualmente a dos años de cárcel, con 18 meses suspendidos, mientras que los exdirigentes de Bygmalion, Franck Attal y Guy Alves, han sido condenados a un año y 18 meses de cárcel, respectivamente, en ambos casos con penas suspendidas.
El caso giraba en torno a una falsificación de facturas para que su campaña se mantuviera por debajo del límite que establece la regulación gala. Así, los investigadores sospechan que el coste real rondó los 42 millones de euros, muy por encima de los 22,5 millones de euros fijados como límite.
El fallo llega después de que un tribunal de Francia ratificara en mayo de 2023 otra condena a tres años de prisión contra Sarkozy en un caso de corrupción y tráfico de influencias en una trama de escuchas telefónicas, igualmente después de que el exmandatario apelara la primera sentencia.
El expresidente, que ocupó el cargo entre 2007 y 2012, se convirtió en el primer antiguo jefe de Estado en sentarse físicamente en el banquillo de los acusados, si bien su predecesor en el Elíseo, Jacques Chirac, fue condenado a dos años de cárcel por delitos cometidos durante su etapa como alcalde de París. Sin embargo, Chirac no llegó a pisar los tribunales por motivos de salud.