Dos hombres, de unos 40 años, han sido detenidos tras huir en un vehículo con el que recorrieron más de 25 kilómetros en dirección contraria por la autopista A-7 de la Costa del Sol después de que la Policía Local de Benalmádena les diera el alto y emprendieran la huida.
Así lo han confirmado a Europa Press fuentes municipales que detallan que todo comenzó en la madrugada del pasado jueves 6 de marzo cuando los agentes municipales dieron el alto a un vehículo Volkswagen Golf de color negro que circulaba a gran velocidad por la avenida de la Constitución.
Según ha adelantado Diario ‘Sur’, los agentes, tras introducir la matrícula en la base de datos, comprobaron que el vehículo no tenía ni seguro ni ITV en vigor, pero los conductores, en una rápida maniobra, emprendieron la huida dirigiéndose a la autopista y circulando en sentido contrario.
Durante la persecución por parte de la patrulla de la Policía Local de Benalmádena, los agentes locales dieron aviso a sus homólogos en las localidades de Fuengirola y Mijas, así como a Policía Nacional y Guardia Civil para recabar su apoyo. En la temeraria acción de huida el coche llegó a esquivar hasta a una veintena de vehículos y estuvo a punto de colisionar con un camión.
El vehículo que iba en sentido contrario perseguido por la Policía Local dio la vuelta a la altura de la primera caseta de control de la autopista de peaje, en la zona de Cabopino en Marbella. Durante la huida, varios taxistas llamaron la atención del vehículo ‘kamikaze’ con avisos a los agentes, e incluso el conductor de un VTC colaboró con los policías para cortarles el paso a los sospechosos cuando circulaban en la carretera entre Fuengirola y Mijas.
Fue precisamente en este punto, en la avenida de Mijas que comunica las dos localidades mencionadas, donde finalmente los dos ocupantes del vehículo se apearon del coche para emprender la huida a pie, pero los policías locales de Benalmádena consiguieron interceptarles y detenerles. Los ahora detenidos opusieron una gran resistencia, e incluso agredieron a uno de los agentes.
El conductor del vehículo dio positivo en un test de estupefacientes, y en el registro del coche los policías locales intervinieron gran cantidad de herramientas como destornilladores y alicates, además de cortafríos.
La Policía Local de Benalmádena detuvo a los dos varones como presuntos autores de delitos de resistencia y desobediencia a la autoridad, mientras que al conductor, además, se le acusa de conducción temeraria y de conducción bajo los efectos de sustancias estupefacientes.
