La decana del Colegio de Arquitectos de Málaga, Susana Gómez de Lara, expresó ayer su confianza de que a lo largo de 2025 pueda entrar en funcionamiento el convenio de colaboración firmado a finales de 2023 con el Ayuntamiento de Málaga que les permitirá asesorar a la Gerencia de Urbanismo con el objetivo de agilizar la tramitación de expedientes.
«Mantenemos reuniones y mesa de trabajo con la Gerencia. Estamos también formando al personal para coordinar estas acciones. Hay que unificar criterios, ver documentos básicos, informes,… Espero que a mitad de año se pueda empezar ya con algún proyecto piloto», comentó la decana durante la presentación del balance estadístico anual de viviendas visadas y terminadas en Málaga.
El protocolo firmado en dieciembre de 2023 con varios colegios profesionales tiene como objetivo que estas entidades aúnen criterios con Urbanismo y revisen los documentos técnicos para comprobar que están completos y acordes a la normativa jurídico-administrativa que, según los colegios, es “compleja” y suele generar “discrepancias” en la interpretación.
Susana Gómez de Lara, decana del colegio de arquitectos de Málaga. / Álex Zea
Se quiere evitar así que los requerimientos de subsanación atrasen la tramitación de los expedientes, debido a la necesidad de hacer correcciones o presentar informes sectoriales, por ejemplo.
Para ello, el Colegio de Arquitectos se está reuiendo con los departamentos de Cultura y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía para preparar el inicio de esta colaboración con la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Málaga.
Los arquitectos ya desarrollan desde hace varios años una tarea similar con el Ayuntamiento de Marbella.
Un nuevo PGOUSobre la reciente propuesta del alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, de revisar el PGOU para desbloquear suelo para vivienda, empezando por los rústicos, la decana dijo que es una medida que puede tener utilidad «a corto plazo», pero afirmó que su preferencia es que se hiciera directamente un nuevo Plan General de la ciudad donde se articulen, analizando todas las particularidades, los suelos disponibles.
«Se supone que los planes generales son el avance del crecimiento de la ciudad, y estamos creciendo con uno que tiene ya muchos años. Hay que analizar lo que se ha cumplido y lo que no y las carencias que pueda tener. La visión de antes es muy diferente a la que tenemos ahora. Habría que mirar además la previsión a futuro para plasmarlo ya todo en un documento nuevo», reflexionó.
El plan del AyuntamientoDe la Torre ha anuciado este mes, durante el Debate sobre el Estado de la Ciudad, elo que ha definido como un «plan de choque» destinado a disponer de suelo para la construcción de vivienda asequible, con las que espera impulsar un ritmo mínimo de construcción de 3.000 viviendas al año.
La primera medida que encabeza ese plan es la elaboración de un nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), el principal instrumento de planificación urbanística y desarrollo de la ciudad que en la capital data de 2011. El Consistorio ha empezado a trabajar ya en un nuevo Plan General, adaptado a la LISTA, que permitirá reservar suelo considerado ahora como rústico para la construcción de vivienda protegida o asequible. Este trabajo requerirá un plazo de tres años.
Urbanismo matiza que no se elaborará un nuevo PGOU desde cero sino que se harán modificaciones puntuales centradas en desbloquear suelo para vivienda, empezando por los rústicos. El PGOU actual cuenta aún con planes parciales pendientes de desarrollar aún, que se vienen arrastrando desde el Plan anterior, de 1997, donde hay bolsas de suelo aún no ejecutadas.